La era de la feliz ignorancia del consumidor debería haber terminado, ya sea que esté considerando alimentos, ropa, productos electrónicos o ayuda doméstica.
Mucho antes de que los humanos se dieran cuenta de que eran humanos, el trabajo ha sido una especie de comercio, intercambio y trueque de tiempo y habilidades a cambio de productos y elementos esenciales. Y eso está bien siempre y cuando todo sea justo. Sin embargo, no todas las situaciones son justas.
Cuando un empleador explota a un trabajador o retiene los salarios, conduce a prácticas injustas (haga clic en esta página). Al considerar el trabajo infantil (haga clic en aquí).
Como era de esperar, dado el progreso que se está logrando (y registrado por el Monitor y otras publicaciones sin sentido) en áreas como la salud, la educación, la seguridad y la justicia globales, el número de niños explotados ha disminuido drásticamente en los últimos años. Hoy hay un tercio menos que en 2000.
Sin embargo, ese número debe seguir disminuyendo, no solo por la explotación desmedida de los niños - la pérdida de la infancia, la coacción de los jóvenes y vulnerables - sino por el ciclo de pobreza que perpetúa. Cuando se presiona a un niño para que trabaje, no va a la escuela. Eso generalmente relega a un niño a una vida de trabajos de bajos salarios o pobreza absoluta.
Los problemas que llevan a los niños en el lugar de trabajo varían. Por ejemplo, cuando un terremoto azotó Nepal el año pasado, muchas familias se quedaron sin hogar. Los niños quedaron huérfanos. El abrumador desafío de reconstruir condujo a una demanda de ladrillos que a su vez llevó a la demanda de trabajadores que los formarían, hornearían, empacarían y transportarían. Era un trabajo servil que los niños podían realizar ... y realizarlo a bajo precio. Y, de hecho, a menudo hacían el trabajo de forma gratuita para trabajar junto a miembros de la familia. Hasta 60,000 niños trabajan en hornos en todo el país.
El usuario final de cada producto debe considerar qué hay detrás de ese producto. ¿Se le pagaba a la gente un salario justo? ¿Se trató a los animales con humanidad? ¿Se dañó el medio ambiente? ¿Los componentes e ingredientes concuerdan con nuestros estándares éticos? Un ladrillo no es solo un ladrillo. Las manos de alguien lo formaron.
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