Justin Dillon, director ejecutivo de Made in a Free World, dirigió la película "CALL + RESPONSE" y la estrenó a nivel nacional en los cines. La película se ha convertido en uno de los dispositivos más importantes para impulsar el movimiento abolicionista moderno y se ha proyectado en todo tipo de salas imaginables, desde el Linwood Dunn Academy Theatre de Los Ángeles hasta los clubes nocturnos de Bangkok. La película presenta a artistas, políticos, periodistas, celebridades y activistas ganadores del Grammy que anuncian el llamado al fin de la esclavitud.